Despues de controlar aun no se como el tilt, no muchas manos despues de perder con AA, me llega la BB estando el nivel a 40/80
Jean Claude sube la apuesta llegandole la mano limpia y varios jugadores van. Yo sin mirar las cartas (el nivel de la subida era muy bajo) hago call. Flop J45 (estas dos ultimas son de treboles) y miro mis cartas. JJ. Reflexión. Tercera mano premium de la noche. He perdido antes con AA y previamente con QQ. Ahora tengo el trio mas alto de la mesa. Hay dos proyectos, uno de color y otro de escalera. Pero pienso, por probabilidad, perder en una misma partida con tres de las cuatro manos mas altas a priori debe ser casi imposible. No voy corto de fichas respecto a las ciegas, pero si respecto a mis rivales. Voy a jugarme all-in, pero en respuesta a alguna subida que habrá en el flop. Sé que alguien subirá, y yo estaré esperando con mis trips. Si esta mano la pierdo, defintivamente será una noche en la cual la suerte me ha dado la espalda de manera descarada y no podría haber ganado.
Me paso. Jean Claude raisea de manera importante, todo el mundo foldea. Es la mía. I'm all in. Jean Claude paga, enseñando KK. Solo una K le salva. Despues de lo visto en la noche, es posible, aunque sea poco probable. El turn no ayuda. El river tampoco.
Me doblo en fichas y a partir de aqui, ya puedo jugar mucho más tranquilo el resto de la noche.
Solo me cabe preguntarme que hubiese pasado si llego a mirar mis cartas preflop y veo JJ. Si meto all in y me lo ven con KK, en ese momento me hubiese dado un paro cardiaco y no hubiese podido acabar la partida por insuficiencia respiratoria. Al fin y al cabo, la suerte no me dio la espalda en la partida de manera completa...
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